Castillo de Segura de la Sierra (Espacio de interpretación…

El Castillo de Segura de la Sierra se trata sin duda de uno de los principales atractivos culturales, no solo de Segura, sino de todo el entorno, con unas panorámicas portentosas de toda la sierra.

El castillo fue levantado entre los siglos XIII y XIV para defender la encomienda de Segura por parte de la Orden de Santiago (llegó a ser residencia del Gran Maestre de esta Orden), aprovechando construcciones defensivas y palaciegas anteriores (ya en siglo VIII existía una fortificación que protegía a la alquería de Saqura, de cuya época se conservan los restos arqueológicos de los Baños Árabes).

Estructuralmente, consta de dos recintos diferenciados: el alcazarejo, defendido por cinco torres, entre ellas la portentosa Torre del Homenaje, donde actualmente se encuentra el espacio de interpretación de Jorge Manrique; y el recinto exterior, construido en mampostería y que dispone de dos aljibes excavados en la roca y una barbacana superior que da acceso a la puerta principal.

El Castillo consta de varios espacios temáticos, situando en el patio de armas una recreación de oficios medievales; en la capilla y la primera y segunda planta de la Torre del Homenaje se sitúan los ambientes interpretativos referentes a la Orden de Santiago; y ya en la tercera planta de la Torre del Homenaje, el espacio interpretativo sobre Jorge Manrique.

Este espacio interpretativo consta de varias escenografías expositivas del ámbito familiar del poeta guerrero, abarcan desde elementos sonoros que recrean la conversación que Jorge Manrique mantiene con su padre, Don Rodrigo, en el escenario de las Coplas a la muerte de su padre, así como otros discursos interpretativos más ligados a la obra poética del autor.

Tras visitar el espacio interpretativo de Jorge Manrique es posible subir a las almenas de la Torre del Homenaje y estremecerse con las espectaculares vistas que ofrece: el Yelmo, con sus más de 1.800 metros de altitud y símbolo de la Sierra de Segura; Segura La Vieja (poblado íbero), el Cerro de Góntar, el mirador de Peñalta y así un sinfín de hitos que, unido a una lectura relajada de la poesía manriqueña, ofrecerá al visitante una emoción que lo conectará para siempre con Segura de la Sierra.